Marcel Marceau, probablemente el mejor artista de pantomima de todos los tiempos, hubiese llegado a sus 96 años este pasado viernes 22 de marzo, pero su vida más que una honra al teatro es un ejemplo para las futuras generaciones.
Nació en el año 1923 y creció en Strasburgo, cerca de la frontera francesa con Alemania. Su padre, Charles Mangel, era un carnicero kosher y un cantante amateur. Su madre era la ex Ann Wezberg. A los siete años Marceau quedó cautivado por Charles Chaplin y comenzó a intentar imitar sus movimientos.